- La IA puede procesar muchos más datos de muchos más sensores de los que los operadores humanos podrían lograr
- Pero el juego del gato y el ratón significa que existen contramedidas para confundir a la IA.
- También hay que tener en cuenta el aumento del rendimiento informático y la proliferación de sensores pasivos siempre activos
Se espera que la aparición de la inteligencia artificial reduzca la eficacia de los submarinos furtivos de ataque nuclear.
Estos avanzados submarinos valorados en miles de millones de dólares, diseñados para operar sin ser detectados en aguas hostiles, han estado durante mucho tiempo a la vanguardia de la defensa marítima. Sin embargo, los avances de la IA en tecnología de sensores y análisis de datos amenazan sus capacidades encubiertas, lo que podría hacerla menos efectiva.
Artículo escrito por Política exterior y Espectro IEEE Ahora afirma que los sistemas de IA pueden procesar cantidades masivas de datos de redes de sensores distribuidos, mucho más allá de las capacidades de los operadores humanos. Ahora, los sensores cuánticos, los conjuntos de monitoreo submarino y las imágenes basadas en satélites están recopilando datos ambientales detallados, mientras que los algoritmos de inteligencia artificial pueden identificar incluso anomalías mínimas, como las perturbaciones causadas por los submarinos. A diferencia de los analistas humanos, que pueden ignorar patrones simples, la IA destaca en detectar estos pequeños cambios, lo que aumenta la eficacia de los sistemas de detección.
Juego del gato y el ratón.
El papel cada vez mayor de la inteligencia artificial podría desafiar la capacidad de los submarinos furtivos como los de la clase Virginia, que dependen de ingeniería sofisticada para reducir sus firmas detectables.
Las baldosas que amortiguan el ruido, los materiales que reducen las vibraciones y las bombas de chorro están diseñadas para evitar la detección, pero las redes habilitadas con IA son cada vez más hábiles para derrotar estos métodos. La proliferación de sensores pasivos y las continuas mejoras en el rendimiento computacional están aumentando el alcance y la precisión de estos sistemas de detección, creando un entorno altamente transparente en los océanos.
A pesar de este progreso, el juego del gato y el ratón continúa, ya que inevitablemente se desarrollan contramedidas para eludir la detección de la IA.
Estas tácticas, tal como se exploran en Política exterior y Espectro IEEE Esta pieza incluye técnicas de camuflaje de ruido que imitan los sonidos marinos naturales, el despliegue de vehículos submarinos no tripulados para crear desvíos e incluso ciberataques destinados a corromper la integridad de los algoritmos de IA. Estos métodos buscan confundir y dominar los sistemas de inteligencia artificial y mantener su superioridad en la guerra submarina.
A medida que se desarrolle la tecnología de IA, los países necesitarán equilibrar los crecientes costos de los submarinos nucleares furtivos con su posible obsolescencia. Las contramedidas pueden proporcionar un grado temporal de alivio, pero la creciente proliferación de sensores pasivos y análisis basados en inteligencia artificial sugiere que es probable que los submarinos convencionales enfrenten rendimientos decrecientes en el largo plazo.