- El grupo que presionó en nombre de ExxonMobil estuvo involucrado en una campaña de piratería y filtración
- La campaña se dirigió a grupos ambientalistas críticos con la industria del petróleo y el gas.
- Hackearon cuentas y filtraron correos electrónicos para frenar el avance de las investigaciones y demandas contra Exxon
Informe por Reuters Un grupo de presión en nombre del gigante energético ExxonMobil ha afirmado que está siendo investigado por ataques dirigidos y filtraciones contra críticos de la industria petrolera.
El informe afirma que los críticos fueron objeto de una campaña prolongada entre 2015 y 2018 en la que más de 500 cuentas de correo electrónico fueron objeto de ataques en un aparente intento de sofocar las investigaciones y demandas contra ExxonMobil.
Ahora, dos senadores demócratas y varios grupos ecologistas piden una investigación sobre el hackeo y una mayor responsabilidad de ExxonMobil por su posible implicación.
Mayor supervisión
En respuesta al informe, ExxonMobil negó cualquier participación en los ataques y también dijo: “Si hubo algún ataque, lo condenamos en los términos más enérgicos posibles”.
DCI Group, que trabajaba en nombre de Exxon Mobil en ese momento, fue investigado por el FBI por supuestamente piratear a críticos de la industria petrolera y filtrar sus correos electrónicos a la prensa, según el informe. DCI respondió al informe en un comunicado, diciendo que la compañía “no participó ni comisionó a otros para piratear u obtener información ilegalmente”.
Los grupos nombrados como víctimas en el informe incluyen el Centro para el Derecho Ambiental Internacional y la Unión de Científicos Preocupados, junto con varias otras organizaciones ambientales como Oil Change International, SKD Knickerbocker y Earthworks.
El presidente de Presupuesto del Senado, Sheldon Whitehouse, expresó su preocupación por las implicaciones. Reuters El Departamento de Justicia, que aún no ha comentado sobre las acusaciones, debería “echar un buen vistazo a Exxon y sus compañeros trabajadores de los combustibles fósiles”, según el informe.
El presidente de Finanzas del Senado, Ron Wyden, se hizo eco de estas preocupaciones y afirmó que el ciberespionaje “amenaza el núcleo de la democracia estadounidense y socava fundamentalmente nuestro sistema judicial”.
a través de Reuters