El gobernador del estado de Sokoto, Ahmed Aliyu, ha emitido una severa advertencia al gobierno local y a los funcionarios de las autoridades educativas del gobierno local para que devuelvan los 30.000 naira como obsequios de oración destinados a los trabajadores del estado que, según informes, fueron desviados a bolsillos privados.
El gobernador exigió la devolución inmediata de los fondos saqueados, amenazando con consecuencias nefastas para quien no cumpla.
El gobernador Aliyu, en un discurso pronunciado en una reunión en la Casa de Gobierno en Sokoto, expresó alarma por las acciones escandalosas de algunos funcionarios de finanzas que privaron a los trabajadores de los salarios aprobados.
Prometió garantizar la rendición de cuentas, la transparencia y la gestión prudente de los fondos públicos, y prometió tolerancia cero ante la corrupción.
El gobernador ordenó a los jefes de las agencias que prepararan listas con los nombres de los trabajadores afectados y garantizaran el cobro de sus cuotas.
Agradeció al pueblo del estado por su apoyo y pidió una cooperación continua mientras la administración busca cumplir sus promesas electorales.
Esta medida se considera un paso audaz en la lucha del gobernador contra la corrupción y muestra su compromiso de garantizar que los fondos públicos se utilicen en beneficio de todos.