La creciente presencia de Satélite Escombros en la tierra La atmósfera ha generado importantes preocupaciones entre los científicos sobre sus posibles consecuencias ambientales. Con más de 10.000 satélites activos orbitando actualmente el planeta (un número que se espera supere los 100.000 en la década de 2030 y quizás medio millón en las próximas décadas), los impactos ambientales del regreso y la desintegración de los satélites se están estudiando de cerca.
Aumento de las emisiones de satélites y cohetes
investigación publicado en metales de Astronave Reentry of Stratospheric Aerosol Particles (2023) determinó que el 10% de las partículas de aerosoles estratosféricos contienen estos metales, provenientes del reingreso de satélites y cohetes. Cuando los satélites llegan al final de su vida operativa, a menudo vuelven a entrar en la atmósfera de la Tierra y se queman en el proceso.
Este evento libera varios contaminantes a la atmósfera superior, incluido aluminio y otros metales. El estudio realizado por el Dr. Daniel Murphy, científico atmosférico de la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica de EE. UU. (Noé), llamó mucho la atención sobre esta cuestión.
Resultados Conor Parker, químico atmosférico del University College de Londres, ha demostrado un fuerte aumento en las emisiones de los satélites de reentrada. Según una investigación publicada en Developing Byproduct Inventories from Large Satellite Launches and Disposal to Determine Impact on Stratospheric Ozone and Climate (2024), las emisiones de aluminio y óxido de nitrógeno aumentaron de 3.300 millones de gramos en 2020 a 5.600 millones de gramos en 2022.
Los lanzamientos de cohetes también contribuyen a la contaminación atmosférica a través de sustancias como el carbón negro, el óxido de aluminio, los óxidos de nitrógeno y los gases de cloro.
Amenazas a la capa de ozono
El efecto de estos contaminantes sobre la capa de ozono ha sido una gran preocupación. el Capa de ozonoEs esencial para bloquear los dañinos rayos ultravioleta del sol y enfrenta el daño potencial del óxido de aluminio, un conocido catalizador del agotamiento de la capa de ozono. Esta amenaza, que se produjo después del éxito del Protocolo de Montreal al limitar las sustancias que destruyen la capa de ozono, como los clorofluorocarbonos, ha alarmado a los científicos.
en entrevista En Science News, el Dr. Murphy destacó otros riesgos ambientales y señaló que el hollín de los motores de los cohetes absorbe la energía solar, calentando la atmósfera. Los metales como el cobre, que se liberan durante la desintegración de los satélites, pueden catalizar reacciones químicas que afectan la formación de nubes y la química atmosférica.
Un llamado a más investigaciones
El creciente número de lanzamientos de satélites exige una investigación urgente sobre su impacto medioambiental. Comprender estos riesgos será fundamental para mitigar los posibles impactos a largo plazo en la atmósfera y los ecosistemas del planeta.