Los astrónomos descubrieron que Planeta extrasolar Ubicado a unos 634 años luz de distancia en la constelación de Piscis, WASP-76b está expuesto a condiciones climáticas extremas sin precedentes en la Tierra. A medida que las temperaturas aumentan a unos 4.350 grados Fahrenheit (2.400 grados Celsius), la atmósfera del planeta está siendo destruida por vientos de hierro de alta velocidad y lluvias de metal fundido. Estos resultados ponen de relieve el alcance de su impacto real en la atmósfera. Extranjero Podrían ser las atmósferas de exoplanetas, especialmente en los “Júpiter calientes” como WASP-76b.
Fenómenos climáticos únicos
La proximidad del exoplaneta a su estrella hace que esté bloqueado por mareas, lo que significa que un lado de WASP-76b siempre está mirando hacia la estrella. Este lado diurno alcanza temperaturas extremas que evaporan el hierro, que luego es transportado al lado nocturno más frío del planeta por fuertes vientos. Una vez allí, el hierro se condensa y cae en forma de gotas de metal fundido, creando un ambiente intenso y hostil.
Este descubrimiento fue realizado por un equipo de científicos de la Universidad de Ginebra (UNIGE) y el Centro Nacional de Competencia en Investigación PlanetS (NCCR PlanetS), dirigido por Ana Rita Costa Silva, estudiante de doctorado del Instituto de Astrofísica y Ciencias Espaciales.
Nuevos conocimientos sobre los climas exoplanetarios
Utilizando el instrumento ESPRESSO del VLT, el equipo pudo observar y medir los vientos de hierro en la atmósfera del planeta. Christophe Lovis, astrónomo de la Universidad de Ginebra, señaló que la resolución de ESPRESSO permitió al equipo recopilar información detallada sobre los procesos dinámicos del planeta WASP-76b. Resultados Ayudará a los científicos a crear modelos climáticos en 3D, proporcionando una mejor comprensión de los climas de los planetas fuera de nuestro sistema solar.
En conclusión, WASP-76b continúa revelando detalles extraordinarios sobre las atmósferas exoplanetarias, proporcionando información valiosa sobre los patrones climáticos en planetas fuera de nuestro sistema solar. El descubrimiento de vientos de hierro y lluvias de metal fundido profundiza nuestra comprensión de los “Júpiter calientes”, proporcionando nuevas perspectivas sobre cuán extremo puede ser el clima planetario.