Después del enorme verano de 1984 (impulsado por los éxitos de taquilla únicos “Ghostbusters”, “Gremlins” y la muy esperada “Indiana Jones y el templo maldito”), Hollywood tenía grandes esperanzas en la temporada 85. Entre las cosas que eran ciertas (“ Rambo: First Blood Part II” y la película de James Bond “A Look to Kill”) y luego en cantidades desconocidas (“Regreso al futuro” y “Gremlins”), la industria promovía el regreso del Western. Con el dúo “Pale Rider” de Clint Eastwood y “Silverado” de Kasdan.
Mientras que “Pale Rider” fue un gran éxito por su modesto costo, “Silverado”, que resultó ser un gran drama de los Hawks con su cuarteto principal de Kevin Kline, Scott Glenn, Danny Glover y Costner, recaudó unos decepcionantes 32 millones de dólares el año pasado. Estados Unidos con un presupuesto de 25 millones de dólares. Resultó que Western estaba donde había estado desde los años 1970: rentable mientras Clint estuviera en el sello.
Aunque los espectadores no asistieron en gran número a “Silverado”, los críticos fueron en general amables y elogiaron especialmente las actuaciones. Y en un grupo de rostros en su mayoría familiares, se destaca Jake, la vivaz y enérgica bala de cañón de Costner.
En una entrevista de 2019 con Entertainment WeeklyCostner recuerda con cariño su época de rodaje de “Silverado”. “Estar en la Silverado fue un gran momento para mí”, dijo. Pero el papel de Jake no pareció encajar perfectamente de inmediato. Como le dijo a EW:
“Siempre sentí que terminaría interpretando a un lacónico personaje del oeste. Y aquí vino este joven jugoso… Este era un papel perfecto para mí. Siempre supe que era una pepita gigante en mi base”.
Cuarenta años después, “Silverado” todavía tiene la reputación de ser un western satisfactorio de la vieja escuela con un toque del encanto de una película traviesa. Es un western hecho por un boom que siempre quiso hacer un western. Obviamente, Costner terminó convirtiéndose en uno de esos mismos boomers con “Dances with Wolves”, “Open Range”, su gira “Yellowstone” y, más recientemente, Su epopeya en curso, “Horizonte: An American Odyssey”. El papel de Jake puede haber sido inesperado, pero el género siempre le ha ido bien. “Me sentí muy cómodo caminando a pelo con él y haciendo locuras”, le dijo a EW. “No puedes evitar querer ser el tipo que monta el caballo en un western. No quieres cederle eso a tu doble de cuerpo. Quieres hacerlo”.